Pocopan

Recorrido: Contadoras, Pocopan

Longitud	Duración	Desnivel	Tipo	Dificultad	A pie	En bici	En coche
3 kilómetros	3 horas	80 metros	Lineal	Media	Si	Si	No

El Aula de la Naturaleza de Las Contadoras, se construye por la administración medioambiental competente, en el convencimiento de que este tipo de instalaciones, ubicadas en el propio espacio protegido, tienen un gran valor como elementos de apoyo a la Educación Ambiental de la población en general, y sobre todo de las clases de edad más inferiores, en particular.

Manteniendo la antigua estructura de la casa de Las Contadoras, de antigüedad superior al siglo. Enclavada en la finca de su nombre y que junto a las de Jotrón y el Cerrado, eran las tres mayores, de las que se expropiaron en los años treinta, cuando se declararon alrededor de cien fincas de utilidad pública de cara a la expropiación forzosa para acometer la corrección hidrológica-forestal. Se construyó este equipamiento a principios de los años noventa y empezó a funcionar como Aula de la Naturaleza en febrero del año 1995, mediante una concesión administrativa a la iniciativa Privada, que es la que presta el servicio, bajo la supervisión de la administración.

Pues bien, de esta instalación y justo al lado de la antigua era de la casa y de un pequeño monumento, realizado en homenaje a unas personas que perdieron su vida en la lucha contra los incendios forestales, sale este itinerario. En su primera parte se va a desarrollar básicamente a lo largo de una curva de nivel de una ladera con exposición predominantemente sur, suroeste.

La zona recorrida al principio, coincide con lo que hace diez años era parte de la Adecuación Recreativa. Veremos restos de esta actividad, antiguos servicios, ahora transformados en almacén, barbacoas, etc. Los pinos dan cobertura a esta senda, los pies antiguos de olivar nos hablan también del pasado agrícola de estos terrenos. Las encinas tienen una mayor presencia, presentándose el algarrobo tan sólo de forma testimonial, lo que nos indica las cotas altitudinales en las que nos movemos. Con suerte, y subidas a los pinos podemos distinguir ardillas. Estas ardillas no son naturales de la zona, pues la masa de pinos es artificial, y evidentemente antes no podían existir en estos terrenos agrícolas. Se introdujeron en los años setenta, procedentes de Cazorla.

El sendero atraviesa posteriormente una zona que fue objeto de un incendio forestal, pero hace muchos años. La recuperación de la vegetación es apreciable, aunque no de las características, en cuanto a tamaño de la que hemos atravesado al principio y de la que nos encontraremos después, Este hecho va a hacer que tengamos unas buenas vistas panorámicas, divisando toda la cuenca del arroyo de Los Frailes, la cuenca del río Guadalmedina, con su margen derecha con el aspecto que presentaban los terrenos que conforman el actual parque hace sesenta años, es decir deforestadas, con tan sólo matorral, y con algunos cultivos más o menos abandonados. Esta posibilidad de vistas, nos van a facilitar el poder contemplar, en su época, las principales rapaces que pueblan el parque, nos referimos al águila culebrera, el águila Calzada y el azor.

Matagallos (Phlomis purpurea), Lentiscos (Pistacia lentiscus), Cantuesos (Lavándula stoechas), Labiérnagos (Phillyrea angustifolia), Romeros (Rosmarinus oficinalis), Durillos (Viburnum timus), Jaguarzo (Cistus salvifolius), algunas de las especies mas representativas de estos terrenos por las que discurre nuestro itinerario.

En el último tercio, atravesamos el carril forestal que va desde el llano de las Contadoras hasta jotrón. A partir de este punto el sendero se vuelve pendiente hasta coronar el cerro de Pocopan (853 mts.). En este trayecto, aparece de forma masiva el Alcornoque (Quercus suber) y la Encina (Quercus ilex). Estos rodales de Quercíneas, son testimonio de la 'vegetación autóctona que poblaba estos lugares en la época previa a la conquista de Málaga por los Reyes Católicos. Muchos de estos ejemplares se han desarrollado en los últimos años al amparo de la cubierta protectora del pinar. Pinar este, que se ha ido aclarando para ir dejando paso a tan vegetación y que con el tiempo conquistará toda la superficie que antes ocupaba.

En la misma cima del cerro, existe una construcción, interesante por su forma constructiva y que no se corresponde con la tipología de los Montes de Málaga. Formaba parte de una red de vigilancia, sobre todo contra incendios, junto con otra situada en el cerro de Fuente la Reina, El posible peligro se transmitía de otra mediante sonido de unas cornetillas, predecesoras corno elementos de transmisión de las actuales emisoras que llevan los guardas forestales en su trabajo.

Permanecer un rato en este lugar contemplando el paisaje, es un privilegio que sólo los que han subido pueden valorarlo en su justa medida.

Fuente: Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía